Memoria 3: EL COMIENZO

Pongámonos en contexto, soy una persona muy libidinosa, ocurrente y pervertida, tengan eso en mente.     

“-Dios no le da alas a los monos”    

Una frase que me describe totalmente, pero ese fin de semana estoy segura que hasta cuernos y un tridente me dio.

Despues de hablarle a mi clan, solo unas pocas quisieron salir esa noche de sábado. El dia anterior me recupere del largo viaje asi que quería aprovechar el tiempo perdido.

El dia anterior no había podido dormir, hacia mucho frio y la cobija con la que me tapaba estaba muy mojada, era como dormir con un manto de hielo. Horrible.

Al dia siguiente; desvelada y con hambre, lo único que quería era salir de mi casa, pero para mi suerte eso no paso, la única amiga que pude sonsacar ese fin de semana ponía de pretexto una “pijamada” asi que básicamente no podía escapar de mi casa… hasta que me conto sus planes.

Ella astutamento dijo eso para que sus padres la dejaran quedarse en mi casa, lo que significaba que muy bien la podíamos amanecer en otro lado sin que ellos sospecharan algo. Simple verdad?

Llego alrededor de las 7 de la tarde, yo había tenido un pésimo dia pero aun asi quería ir a emborracharme , quería olvidar ese mal dia, esas malas vacaciones.

Al verla me llene de alegría, platicamos un buen rato mientras nos arreglábamos, claro extrañaba a mi amiga y quería ponerme al dia en su vida, mientras tanto seguíamos planeando a donde ir.

“un bar”- dijo ella

Buena idea, un bar, cierran a las 2 am, y si nos emborrachamos podemos irnos caminando porque no están muy lejos de mi casa. La idea fue fantástica, no tenia porque no gustarme, hasta que volvió a hablar.

“Aunque mi novio va a ir con unos amigos a una fiesta, también podríamos ir” - prosiguió

Esa idea me encantaba, un bar por lo regular, la gente siempre iba con su “acople” no siempre iba a conocer a gente nueva, una fiesta era diferente, la cerveza no iba a faltar y no había meseros con la cuenta al final de la noche.

“háblale”- apure a decir yo

Nos pusimos de acuerdo con su novio y quedo en ir a mi casa por nosotras alrededor de las 9 pm le comente a mi amiga hasta que hora se estarían y dijo que alrededor de las 3 am se devolvían.

Perfecto. No porque me regañaran al contrario, tenia casa sola. Pero no iba a meter a desconocidos a la casa. Seré fiestera mas no pendeja.

Seguimos platicando mientras nos arreglábamos hasta que diera la hora. Me fui lo mas simple que puedan imaginar; Jeans, botas de motorista, con calcetines dispar, una blusa interior de mi prima y una camisa a cuadros que parecía de hombre. Me daba igual, siempre vesti asi, nadie me conocía, no los volveria a ver, además iba en plan de emborracharme, a la mierda las apariencia y lo que pensaran de mi. Ademas esa blusa escondía mi gordura.

Llego por nosotras, y nos fuimos rumbo a la fiesta, cuando llegamos sorprendente mente no era en un salón, bar o mínimo una casa, era un terreno donde un aproximado de 35 personas se conglomeraban  alrededor de una fogata algo escueta. Debo decir que nunca estuve mas contenta de haberme puesto esa camisa a cuadros y no mis típicas camisas de metallica. Habia mas hombres en sombrero que cerveza en mano.

La música sonaba estruendosamente , provenía de una rockola, si sorprendente, aun no se de donde sacaron energía eléctrica, si para mi estábamos en medio de un terreno alejado de la mano de dios.

Sabia que tenia que socializar, me gustaba, pero aun asi tenia esa presión de no tener otra alternativa, porque solo conocía a mi amiga y a su novio, además que es horrible de andar de mal tercio, pero al principio no me quedo alternativa que ser ese horrible mal tercio, quedarme un poco con ellos en lo que el alcohol me quitaba un poco el frio.

Lo usual es entablar una conversación con los demás amigos que venían con el novio de mi amiga, ellos se veian mayores que yo, genial, no tenia que tratar con bromas estúpidas, bueno grave error de mi parte, los hombres siempre actuaran como idiotas.

Mi meta era socializar para conseguir mas alcohol, para asi desinhibirme y empezar a bailar o gritar o lo que fuera para que se me quitara el maldito frio.

Eran tres hombres jóvenes, alrededor de los 24 años, se veían simpáticos y fueron corteses. Haciendo bien las primeras preguntas, aunque sean estúpidas te vas dando cuenta del tipo de personas que son o mínimo como tratarlas. Fue fácil. Debo de decir que no me aprendí sus nombres pero con una sonrisa todo se arregla.

Reglas básicas para socializar que a mí siempre me han funcionado.

-       Tratar de ser tu el que pregunte (cualquier cosa)

-       Si crees que puedes bromear hazlo.

-       Nunca dejes de hablar o de sonreir.

-       Por muy estúpida que sea la respuesta, rie.

-       Ser coherente.

Creo que era mi cuarto vaso y me dieron ganas de ir al baño, muy mal, en medio de la nada podía encontrar un baño decente?  Absolutamente no, arrastre a mi amiga a un carro cercano y lo hicimos nuestro baño. Claro que no me podía poner quisquillosa, y menos si no conocía a nadie en la fiesta. En todo momento y en cualquier situación siempre te tienes que adaptar.